Texto escrito por Pablo y Sela*
El sabor delicioso del postre es muy apreciado en diversos países. En el litoral y en la montaña es un placer para los sentidos, así como son un placer para el alma las obras literarias, inspiradas por la pasión, que les prestan sus títulos a los postres. La simbiosis entre culinaria y literatura se actualiza en cada bocado y los cocineros encuentran nuevas formas de alimentar el cuerpo y el imaginario.
Postres compuestos por una rebanada de queso con otra de dulce de molde se encuentran a lo largo de toda Hispanoamérica, en Brasil y en la península Ibérica. En muchos de esos lugares se usa el dulce de membrillo, en otros la guayabada, dulce de batata, de tejocote… Los quesos también cambian, siempre de acuerdo con la disponibilidad y los hábitos regionales. Hay una miríada de variaciones de ese postre rústico, hecho con ingredientes de fácil conservación (y, por lo tanto, una mayor disponibilidad en regiones apartadas) cuya elaboración se conoce desde la antigüedad.
De ese universo de sabores, la vida nos puso frente a dos variaciones, que son el tema de este artículo: el romeo y julieta mineiro (del estado brasileño de Minas Gerais) y el martín fierro uruguayo.
El romeo y julieta
En Brasil, el dulce usado tradicionalmente en el romeo y julieta es la guayabada, el más popular y democrático entre los dulces brasileños. Por otra parte, el estado de Minas Gerais, tradicional productor de lácteos de Brasil, es la cuna del queso minas, un queso fresco sin cura. Así, el romeo y julieta recibe en Barsil una variación única: guayabada con queso minas. Hete aquí que, imprevistamente, surge, en el fervor de las redes sociales, una imagen impactante de un romeo y julieta:
Meme “Queijo com goiabada bão tamén”. Autoría desconocida.
Dado el hecho evidente de que el texto fue insertado digitalmente, buscamos la fotografía original para entender el recorrido de la imagen, y descubrimos que el meme es fruto del trabajo de Marino Junior, un cocinero y fotógrafo mineiro, y un humorista anónimo.
Esa presentación del romeo y julieta imita la bandera de Minas Gerais, que dice “Libertas quae sera tamen”, es decir “libertad, aunque sea tardía”, texto que Marino Junior obvió en su estilización. Sucede que parte de Minas Gerais se sitúa en la región del dialecto caipira, que en algunos casos, entre sus muchas características, presenta la diptongación de nasales (bom > bão) y la asimilación de /b/ a /m/ (também > tamém). El autor del meme juega con ese dialecto al insertar, en la imagen del manjar, el texto “queijo com goiabada bão tamém” (“el queso con guayabada es bueno también”): en ese contexto lingüístico, se trata de una forma habitual de decir que algo es rico.
Vale la pena notar esa transmutación: el paso de una idea, un valor abstracto expresado en latín, a una noción sensorial, un valor terrenal que involucra placer y alimentación. Dicha transmutación ilustra el sentir brasileño, que parece ser dado a la irreverencia y a la desacralización de los símbolos, eventualmente incluso a la chacota y la iconoclasia, pero siempre por medio del humor. Sería posible decir que esa espiriuosidad es típicamente brasileña.
El martín fierro
En Uruguay, el postre se prepara con queso y dulce de membrillo, y se presenta con el nombre “martín fierro”. Cabe mencionar que no se usa un queso en particular, sino algún queso común, curado, como un queso colonia. También llama la atención que el nombre “martín fierro” no se refiera a ese postre cuando se usan dulces distintos del de membrillo, aunque sean muy comunes en el país otros dulces de molde, como el de batata o el de zapallo, y la guayabada, proveniente de Brasil, además del dulce de leche, que también se consumen con queso.
La cuestión es que las denominaciones de ambas versiones de ese postre nos sugieren distintas lecturas gastronómicas.
Divagaciones
Da la sensación de que en el romeo y julieta el contraste es menor de lo que podría parecer, si pensamos en las características del queso minas, menos salado y más cremoso, y de la guayabada, ácida y dulce. El sutil maridaje de los sabores parece conversar con los personajes shakesperianos elegidos para denominarlo: pese a la rivalidad irreconciliable entre Capuletos y Montecchios, los adolescentes de convirtieron en un símbolo de amor incondicional, que desafió las diferencias y la polaridad de las familias.
Por su parte, el martín fierro despierta la sensación del conflicto casi romántico que antecede al maridaje de dos sabores muy reconocibles: un queso con personalidad fuerte, y salado, y un dulce de fruta firme e intenso. El choque entre el hombre de campo y el orden instituido cruza la epopeya del gaucho Martín Fierro, obra ampliamente conocida en el mundo hispánico, Brasil, y por el mundo.
En el romeo y julieta parecen elevarse un poco más los valores del espíritu, el amor, mientras que en el martín fierro las pasiones, las acciones del cuerpo, predominan en el centro del escenario. Sin embargo, ambos postres reúnen en sí las fuerzas del par dialéctico cuerpo-espíritu. La composición visual específica del romeo y julieta de Marino Junior es particularmente feliz para ilustrar esa tensión. la imagen de la bandera es el símbolo de lo instituido, de lo civilizado, de la elevación espiritual del ser humano —aún más si recordamos que el triángulo representa la Santísima Trinidad y que la bandera en sí presenta la frase en latín, lengua de la religión y la erudición en la época de los inconfidentes que la crearon—; a su vez, la materialidad del postre nos habla de lo vernáculo, lo cultural, lo popular, la sensorialidad, el alimento, los placeres del cuerpo. En un nivel más arriba, el humor produce la síntesis de ambos dominios.
Sin embargo, la dualidad se repite en un nivel inferior, y eso se aplica también al martín fierro. En ambos, el postre está compuesto por dos ingredientes: uno derivado de la leche, originado en el reino animal; el otro, de las frutas, que pertenecen al reino vegetal. Ambos reinos están en la historia del ser humano desde el nomadismo, en que se asociaban a la caza y la recolección, hasta el sedentarismo, en que se asocian al ganado y a la agricultura. Así, ambos postres traen en lo profundo de sí la unión entre el ser humano cazador y el agricultor, el nómada y el sedentario, el instinto y la razón.
Son postres que, de una forma más amplia, componen el proceso alquímico de la fusión de los opuestos, la comunión, el casamiento entre diferentes. A partir de ese punto, resulta patente la relación íntima de lo regional con lo universal, y otras filosofías pueden ser convocadas a manifestarse y dar su contribución. En el taoísmo, por ejemplo, los opuestos están destinados a relacionarse, como el yin y el yang, que están en constante interacción y, por ello, se transforman, juntos, en un tercer elemento, en un flujo continuo desde el inicio de los tiempos: vasija de barro y punta de flecha, recogimiento y expansión, contención y movimiento, y el fuego alimentando la comunión y quemando los conflictos, las imposibilidades. Así, Capuletos y Montecchios se atraen: diferentemente de lo que sucede en Romeo y Julieta, en el romeo y julieta producen un acto sublime pese a las querellas. A su vez, finalmente, Martín Fierro encuentra, transmutado en el martín fierro, el equilibrio y la recompensa de su pasión.
Agradecimientos:
A Marino E. Santo Jr la disponibilización de la imagen original de su romeo y julieta y el permiso para usarla.
A Lujan Oronoz Lopez, el haber publicado en Pinterest la foto del martín fierro. Intentamos entrar en contacto para pedir permiso para reproducirla, pero no fue posible. La retiraremos en caso de que así lo solicite.
Al anónimo que transformó la foto del romeo y julieta en meme, meme que, cumpliendo su dinámica de circular y transmitirse, llegó hasta nosotros y propició estas divagaciones.
* Sela es artista plástica formada en la Universidade do Estado de Santa Catarina e investiga asuntos relacionados con arquetipos, símbolos, imaginario y sagrado, razón por la cual la invité a escribir este texto conmigo. Además de pinturas, también desarrolló y comercia su marca de pintura Sela Tintas de Terra. Mantiene el sitio Sela Pintura y el blog Sela Arts.